Avispones!
Editor y webmaster Hacer clic aquí para agrandar las fotos! Parte 2: A
partir de
principios de mayo, con una temperatura lo suficientemente alta, se despierta de
su hibernación, una joven reina avispón (su tamaño alcanza hasta 35mm) nacida y
apareada en el otoño del año anterior. Debido a que pasa el invierno dentro de
árboles de madera podrida o debajo de la tierra, no puede sufrir ningún daño por
la helada. Durante este tiempo, sus órganos trabajan ahorrando el máximo de
energía, además se produce en su cuerpo una protección contra la helada, llamada
Glicerol, de suma importancia para su supervivencia. Primero
realiza
vuelos de reconocimiento hacia lugares apropiados para crear un nido y calma su
hambre con la savia de los árboles, al mismo tiempo que caza sus primeras
presas.
Cuando la reina avispón se decide por un lugar para la creación de la colonia, sujeta en un pequeño pedúnculo, elaborado de un material hecho por ella misma, sobre la cobertura del hueco del nido y forma a continuación las primeras celdas hexagonales del panal. Añade, junto a las primeras celdas, otras nuevas (máx. 40-50) que pronto son cubiertas con un huevo. Pasados de cinco a ocho días, se desarrolla una pequeña larva (tamaño 1-2mm), que en los doce a catorce días siguientes atraviesa los cinco estudios de desarrollo de una larva.
El insecto listo rompe finalmente con los dientes la cobertura que cubre las celdas, sin ayuda de sus hermanos, y sale del huevo. Ese procedimiento puede ser terminado en pocos minutos, como también puede durar un día entero (a veces puede llegar a durar más). Las obreras pueden dar de comer al avispón salido del huevo, mientras éste elabora un capullo (mirar luego en nuestra galería de fotos). El material de construcción, contrariamente a los otros "bienes recolectados" como el agua, jugos ricos en carbohidratos y proteínas en forma de presas, no son compartido con otras hembras en el nido, sino que las recolectoras lo siguen procesando y coleccioándolo luego en el nido. Las obreras recién salidas del huevo, que todavía no pueden realizar trabajos de recolección, ayudan a la reina en la ampliación del nido. Ellas salen del nido a partir del segundo o tercer día. En este momento comienza la inserción de una cobertura con forma de esfera para la protección del nuevo nido. Cada
celda de
las obreras ("pequeñas celdas") puede ser usada hasta cuatro veces. Las "celdas
grandes" que corresponden a los avispones con la capacidad de reproducirse
(reinas y zánganos) pueden ser usadas por el contrario sólo 0,7-veces.
Después del nacimiento de cinco a diez obreras, la reina comienza a volar
cada vez menos y las obreras se hacen cargo poco a poco de sus obligaciones. Las
obreras (18-25mm) son notoriamente pequeñas en comparación con la reina (35mm),
y viven sólo de tres a cuatro semanas.
A medida que van naciendo nuevas obreras, la reina finaliza con sus vuelos.
El momento más peligroso para la colmena de avispones se ha superado, porque en
el nido la reina está má protegida. La reina se va a encargar a partir de esta
fase de poner huevos hasta el final de su vida.
Se deben criar más obreras para permitir el crecimiento de la colonia. Trabajan incansablemente recolectando comida, materiales de construcción y agua. Los avispones continúan con la recolección sin importar el clima de la noche. A los avispones les atraen las luces brillantes y como a las polillas les hace perder la orientación. Como resultado de esto, a menudo los avispones chocan contra ventanas causando a veces miedo a las personas que estan dentro. Al apagar la luz, ellos son capaces de recuperar rápidamente la orientación y continuar su vuelo. Los avispones son capaces de volar con una luz, cuya intensidad es de 0,01 Lux, con la cual el ojo humano no es capaz de ver! Los avispones pueden dormir como nadie. Pero esto se debe a un comportamiento enigmático: aproximadamente entre 20 a 25 veces por noche, el pueblo entero, desde la reina hasta las obreras, cae en una especie de sueño profundo como un comando secreto. Los avispones simplemente paran y no realizan ningún movimiento durante medio minuto. Después de esta corta pausa, ellas continúan con sus actividades, como si nada hubiera sucedido.
La madera podrida provee la materia prima para la construcción del nido.
Los
animales
arrancan la madera podrida con sus mandíbulas, astilla por astilla y lo mezclan
con saliva; luego lo mastican y forman bolitas con sus patas.
Los lugares de donde los avispones extrajeron la madera podrida son fácilmente
reconocibles.
Si se recolecta el suficiente material para el nido, una vez lavado y colocado en las celdas o cubriendo el panal; la saliva de los avispones sirve como pegamento.
Las celdas de avispones son un verdadero milagro de la naturaleza, cuyo método de construcción lo han ido heredando de generación en generación desde hace millones de años.
Para nosotros los humanos es casi incomprensible, el sentido de simetria y regularidad que expresan los avispones en la construcción de sus celdas (en los nidos) y la armonia entre unas y otras.
>>> Aquí continua a la parte 3 <<<
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